miércoles, 6 de noviembre de 2019

Microrrelatos sin pudor (Volumen 48): Animal salvaje



Ya no recuerdo
Cómo era Antes
De conocernos
Y que me convirtieras
En un Animal
Salvaje


(CONTINUARÁ).



martes, 29 de octubre de 2019

Las 10 más vistas del año antes del 10.


Cumplimos 10 años.
Hoy es nochebuena.
Mañana navidad, y empieza el año 60 D.D. (después de Diego).
Como este último año no hemos escrito mucho por aquí nos tenemos que remitir a rescatar las 10 entradas más vistas antes de comenzar el año 10. No serán las mejores, pero seguramente tampoco las peores. Son las más vistas. A saber por qué.
Quizás no lleguemos a publicar más. A lo mejor fue bonito mientras duró. En cualquier caso, ha durado más de lo que nunca llegamos a imaginar.

10: "El Iter Sopena (Diccionario Ilustrado de la Lengua Española)".


9: "Besos furtivos".


8: "24 de julio: Santa Christina".



7: "26 de julio: Santa Ana".


6: "Me aterra pensar que Elisabeth Shue pueda estar ahoracolgando fotos de gatitos en Instagram".


5: "No quiero una media naranja, quiero un melón entero".


4: "Microrrelatos sin Pudor (Volumen 10): El póster de WendyJames".


3: "Buscad la belleza, es la única protesta que merece la penaen este asqueroso mundo".


2: "Los 27: Elegía por Amy Winehouse y absentas varias".



1: "Obsesiones y Parafilias (Volumen 9): La chica que soñaba conser el dedo pulgar de la mano derecha de Robert De Niro introduciéndose en laboca de Juliette Lewis en una escena de El Cabo del Miedo".




Pero, aunque hay que querer a todos los hijos y las hijas por igual (o eso se dice sin darle la importancia que tiene que se diga que "hay que querer"), siempre se tienen favoritos. Y como los mundos, hay otros, pero están en este...

Gracias por estar por ahí.



jueves, 20 de junio de 2019

Besos que explotan





Los besos más maravillosos que he vivido nunca son aquellos inesperados, los que empiezan con unas risas, con un acercamiento torpe, con unos toquecillos de cabeza a la manera de los ciervos, acercando mejillas y chocando la frente ligeramente hasta que los labios se rozan y de repente se dispara la pasión. Como el que acerca con miedo la llama de una cerilla a la mecha de un fuego artificial, con cuidado de no quemarse con ella, torpemente para no prender en un sitio inadecuado y que no le dé tiempo a huir porque le explota en la mano. 

Sí, definitivamente mis mejores besos han sido los que me han explotado en las manos...



lunes, 10 de junio de 2019

La Hepburn y los lunes





Los lunes me da por pensar.
O, al menos, me lo debo y lo intento.
Hoy es lunes y he pensado que Katharine Hepburn podía ser siempre lo que quería. Incluso ser más hombre que todos juntos. Más hombre que cualquier hombre que la pretendiera. Hoy lunes Katharine Hepburn hubiera sido más que tú y que yo juntos. Aunque tú y yo no seamos nada.
Es lunes.
Los lunes tú y yo no somos nada.
No como Katharine Hepburn, que era más hombre que todos juntos.
Incluso los lunes.
Cuando intento, porque me lo debo, pensar.
Los lunes me da por pensar.









jueves, 16 de mayo de 2019

Orgasmos furtivos






Me he dado cuenta de que últimamente he usado la expresión “orgasmos furtivos” por encima de mis posibilidades. Creo que paso mucho tiempo escribiendo. Me doy cuenta. A la menor oportunidad me encuentro lo de “orgasmos furtivos” entre las palabras que escribo. Es curioso, pero cuanto más escribo, menos posibilidades tengo de encontrar “orgasmos furtivos”. Pero lo escribo una y otra vez. Si no escribiera me costaría muchísimo encontrar con quién tener orgasmos. Furtivos o no. Pero escribir tanto, y repetir lo de “orgasmos furtivos”, me está alejando de tenerlos. Tendría que vigilar más lo que escribo y los orgasmos que no busco por estar escribiendo. Tendría que preocuparme más de mis orgasmos (furtivos o no) y menos de lo que escribo. Porque llegará un momento que, de tanto escribir y no tener orgasmos furtivos, dejaré de poder tenerlos (furtivos o no). Me he dado cuenta de que últimamente he usado la expresión “orgasmos furtivos” por encima de mis posibilidades. Y tampoco escribo tanto como quisiera...




sábado, 30 de marzo de 2019

Esta noche pierdo la hora que gané cuando te vi aquella noche...




Esta noche pierdo la hora que gané cuando te vi aquella noche.

Cambian la hora. Cambiamos la hora. Dicen que nos quitan una. En las noticias avisan de que tenemos una hora menos para dormir. Mis amigos, en cambio, piensan que tenemos una hora menos para emborracharnos. Las redes sociales se inundan de gente que lamenta que esta noche van a perder una hora.

Yo no.

Creo que no voy a perder una hora porque no la he tenido nunca. Porque esa hora que desaparece, en realidad, no existe.

Yo no voy a perder una hora.

Sé que me gusta pensar que gané una hora en el cambio anterior. El bueno. El que la gente valora porque ganas una hora. Cuando dicen en los informativos que tenemos una hora más para dormir. En el que mis amigos dicen que nos vamos a emborrachar al nivel de una hora más. En octubre se inundaron las redes sociales de gente que celebraba que esa noche iban a ganar una hora.

Yo no gané nada.

Esta noche me gustaría recordar, si no quitaran la hora que desaparece, que aquella noche de octubre aprovechamos la hora que no existía para estar juntos sin que nadie se enterara.

Ni siquiera nosotras. Que no existimos ni nos conocemos.

Como esta noche.

Esta noche pierdo la hora que gané cuando te vi aquella noche...








viernes, 15 de marzo de 2019

A veces te intento acariciar




A veces te intento acariciar.
A veces me pides que me acerque y entonces creo que debería acariciarte.
A veces te intento acariciar pero no puedo.

A veces te intento acariciar con palabras.
A veces me pides que me acerque y entonces creo que debería acariciarte con palabras.
A veces te intento acariciar con palabras pero no puedo.

En ocasiones siento que no puedo hacer lo que los dos queremos que haga.

A veces te intento acariciar pero no puedo porque no sé.
Ni con palabras...




miércoles, 13 de febrero de 2019

Elogio infame a la nostalgia.





Hay razones por las que antes todo era mejor.



Los amigos eran más amigos y sus problemas eran tonterías intrascendentes.
Los tomates sabían a tomates.
Y yo no sabía de tu existencia.



Hay más razones por las que antes todo era mejor, pero ahora sólo me acuerdo de estas.



martes, 5 de febrero de 2019

Microrrelatos Sin Pudor (Volumen 48): Tener dinero para amarnos.





Quiero volver a tener dinero.
Para comprar dos libros iguales.
Leerlos por separado y luego hablar de ello juntos.
Y si podemos, amarnos.
Dependiendo del libro.
Y de nosotras, claro.
Pero, sobre todo, del dinero.